martes, 12 de febrero de 2013

REGALAR EN SAN VALENTÍN

Después de la movida del caso Bárcenas y lo apenados que estamos con el abandono de la casa de Ratzinger vamos a los que realmente nos concierne en éstas fechas: San Valentín.

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La compi del blog Una de rizos se ha currado un buen post para el tema pero yo añadiré un par de puntos más, para los pobres descarriados que un día decidimos tener hijos y por lo tanto, renunciar a todas estas fechas.

Yo soy de las que piensan que son días de puro consumismo pero también es verdad es que me gustan más las fiestas que a un tonto un lápiz y cualquier excusa es buena para amenazar de muerte a P si se le  ocurre llegar a casa con las manos vacías.

Para nosotros eso de salir a cenar en plan novios y luego tomar un Gin Tònic es un recuerdo borroso en nuestra memoria así que hay que tirar de imaginación:

Si tengo pasta le envío una cesta al trabajo... no es tan por regalarle algo, si no por la vergüenza que sé que pasa cuándo entra el mensajero en la oficina con el regalo y todas las gallinas le miran y oooooh aaaaah pero qué mujer más buena que tienes!... aaaaaish... ojalá mi novio....

Si tengo pasta pero poca, entro en una compañía aérea low cost y busco el vuelo más barato (intentando que no sea Albacete o similares) y reservo un par de billetes. Lo bueno de hacer esto es que no hace falta que tengas pasta para el viaje entero, sólo comprando los billetes ya tienes el regalo. Que usareis un par de meses más tarde pero ya tienes una sorpresilla para el día en sí, tiempo para planear a quién enchufas a los monstruitos y además ahorrar unos eurillos para terminar de pagar el hotel.

Una de mis opciones para este año que estoy en paro y más tiesa que la mojama es tirar de internete y bajarme un porrón de capítulos de alguna de nuestras series, (en alguna web totalmente legal y de pago clar claro... ejém...) comprar un par de botellitas Damm Inédit y unas cuántas chuches guarrasasquerosas y encerrar a los peques en la torre más alta (leáse en una habitación con una peli y palomitas y cruzar los dedos para que se duerman)

Sobre el sexo no hablamos, porqué ahora mismo no recuerdo qué é lo qué é... investigo y os cuento XD

2 comentarios:

  1. Esos son varios de los muchos motivos por los que mi instinto maternal está más que requeteenterrado, jaja.

    Lo de S. Valentín yo nunca lo he celebrado. No sé, nunca le he dado importancia ni ha significado nada para mí, y eso que en mi casa mi padre siempre le llevaba a mi madre un ramo de rosas.
    Suena tópico pero prefiero tener detalles a lo largo del año cuando me da, o cuando me apetece o puedo permitírmelo. Me parece tan o más coñazo que los típicos cumpleaños de colegas... que no sabes qué comprar, justo ese mes estás sin un duro..y acabas comprando cualquier cosa, todo por quedar bien.

    Este S. Valentín es el primero que paso con mi pareja... a lo mejor me sorprendo y me regala algo, a saber. Pero espero que no espere nada por mi parte... porque va listo, jajaja

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  2. Sí, tienes toda la razón, no hay nada más chachi que regalar, o te regalen algo "porqué sí" y yo antes pensaba igual... pero ahora cualquier excusa me va bien para parar de niños/curro/casa/quehaceresmonotonosdemierrr y hacer alguna cosilla... si tu churri se inspira y se presenta con algo no te sentirás perraca por no darle nada? es que me ha pasado... y me entran unos calores...

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